Durante la conferencia general de octubre de 2022, recibimos mucha inspiración por parte de nuestros líderes.
Uno de esos discursos especiales, fue el de la hermana Kristin M. Yee, segunda consejera de la Presidencia General de la Sociedad de Socorro, que habló sobre el perdón.
Aquí compartimos algunas de las citas más resaltantes de su mensaje.
1. Sanar un corazón herido
“Gracias a la Expiación de Jesucristo podemos sanar un corazón negativo”.
Es natural que nos llenemos de malos sentimientos cuando nos lastiman. Sin embargo, no debemos permitir que eso permanezca en nosotros porque nos hacemos daño.
Busquemos purificar nuestro corazón a través de Jesucristo, Aquel que nos enseñó a amar a pesar de las injurias de los demás.
2. Otorgar perdón es una de las cosas más dulces que podemos experimentar
“El perdón es una de las cosas más difíciles que podemos hacer y una de las cosas más divinas que podemos experimentar”.
Sé que perdonar no es fácil, pero cuando lo haces, te quitas una inmensa carga de encima y por fin puedes sentir paz y volver a comenzar.
Vivir con resentimientos es solo un ancla al pasado, elije el perdón así no te lo pidan.
No te quedes en el ayer, vive el hoy, decide disfrutarlo, y no estropees tu futuro por sentimientos que no te llevarán a nada bueno.
3. Perdonar no significa mantener vínculos que te lastiman
“Perdonar a alguien no significa que debes quedarte cerca de las personas que te han hecho daño”.
Extender perdón no significa que debas mantener vínculos con las personas que te lastimaron. Puedes perdonar y decidir alejarte si eso es lo más sano para ti.
4. Perdonar con la ayuda de Dios
“El Señor requiere que perdonemos por nuestro propio bien, pero no nos pide que lo hagamos sin Su ayuda, amor y comprensión”.
Debido a que el perdón es un acto muy difícil es importante recurrir a la ayuda de Dios, para que limpie nuestro corazón de todo sentimiento que no debemos albergar. Solo Él puede ayudarnos a verdaderamente dejar eso que nos lastimó en el pasado.
5. Eliminar el veneno del odio
“El amor de Dios elimina de tu corazón y tu mente el veneno del odio”.
El odio es un veneno que te carcome el alma. Ninguna persona en su sano juicio decidiría tomar esa sustancia nociva si ama la vida. Eso es precisamente lo que haces cuando dejas que el odio prevalezca en ti. Sin embargo, afortunadamente, recibimos el don liberador del perdón, que nos permite continuar nuestras vidas por un nuevo camino de luz, paz y felicidad.
Por más cosas malas que te hayan hecho elige el perdón, busca la ayuda de Dios para extenderlo y ser feliz. Por la gracia de Dios, puedes perdonar sin que esa persona se acerque a ti y se disculpe.
El perdón es por tu bien.