Pregunta
Tengo una hija de 22 años que, a los 14, intentó acabar con su vida después de estar en una relación tóxica.
Estuvo detrás de ese chico durante 5 años hasta que conoció a su siguiente novio, con quien salió durante otros 4 años; esta también fue una relación tóxica.
Terminó su relación con ese chico y comenzó a salir con otro, su actual novio.
Rompió con ese chico y comenzó a salir con otro, con quien ahora está en una relación. Imagen: Canva
He intentado hablar con ella sobre cómo está repitiendo aquellos patrones tóxicos, ya que se controlan mutuamente en Instagram, rastrean sus ubicaciones y se cuentan cada detalle de sus vidas.
Estoy cansada de ayudarla a superar todo esto y me pone nerviosa porque me recuerda cuando intentó suicidarse.
¿Cómo manejo una hija como ella y la montaña rusa emocional en la que me tiene?
Respuesta
Tu agotamiento por la montaña rusa emocional de tu hija es una señal importante que no debes ignorar. Imagen: Canva
Es muy difícil dejar que tu hija maneje su propia vida cuando casi la perdiste hace ocho años. Esa es una experiencia aterradora de superar, especialmente cuando su comportamiento actual parece el mismo.
Probablemente sientas que es importante que sea independiente, pero también, comprensiblemente, no tienes la confianza en que ella sepa lo que es mejor para su vida. Hablemos sobre cómo puedes apoyarla sin que tu salud mental se vea afectada.
Tu agotamiento por todas las emociones de tu hija es una señal importante que no debes ignorar. ¿Qué te está diciendo? ¿Significa que necesitas escuchar menos detalles de su vida? ¿Significa que necesitas un descanso de hablar con ella?
Trata de entender lo que tu agotamiento te está diciendo. Afortunadamente, nuestro cuerpo tiene mecanismos de retroalimentación que nos protegerán si los escuchamos.
Esto generalmente está impulsado por la culpa y el miedo. Imagen: Canva
La mayoría de nosotros ignoramos estas señales y seguimos adelante pensando que necesitamos amar más, dar más o sacrificar más. Esto generalmente está impulsado por la culpa y el miedo.
En cambio, date permiso para reducir la velocidad, reflexionar, orar y considerar lo que está ayudando y lo que no está ayudando. Aquí tienes algunas preguntas para considerar:
- ¿Tu hija te está pidiendo directamente apoyo o te estás metiendo en su vida?
- ¿Tienes la necesidad de saber todos los detalles de su vida para poder protegerla?
- ¿Qué papel quieres desempeñar en su vida?
- ¿La ves como alguien capaz de dirigir su vida?
- ¿Qué temes que suceda si no te metes en los detalles de su vida?
- ¿Te preocupa su seguridad?
- ¿Está haciendo algo para mejorar su salud mental y relacional?
Si está en peligro, entonces no hay duda de que debes intervenir y llevarla a un lugar seguro. Imagen: Canva
Si tu hija no está en peligro de hacerse daño a sí misma ni a otros, intervenir constantemente para protegerla solo las perjudica a ambas.
Si está en peligro, entonces no hay duda de que debes intervenir y llevarla a un lugar seguro. Sin embargo, ella podría elegir una vida de relaciones disfuncionales que, aunque difíciles de ver, no son tu responsabilidad gestionar.
Tu hija no tiene buenos límites contigo y parece que comparte en exceso, lo que te da una visión de primera fila de su vida inestable. Está bien que dejes de hacer preguntas sobre sus relaciones y también está bien que le pidas que no comparta todo.
Nunca encontrarás paz estando al frente de su drama relacional inmaduro. Imagen: Canva
Aún puedes tener una relación con ella sin saber todos los detalles de lo que sucede en su vida amorosa.
Nunca encontrarás paz estando al frente de su drama relacional inmaduro. Si ella no utiliza la discreción, entonces siempre puedes pedirle menos información. Esto puede ser difícil porque creerás que saber más te ayudará a protegerla.
Ella ahora es una adulta y necesita encargarse de gestionar su propia seguridad y estabilidad. Puedes ofrecer apoyo y recursos, pero ella tiene que preocuparse por esto tanto o más que tú.
Puedes ofrecer apoyo y recursos, pero ella tiene que preocuparse por esto tanto o más que tú. Imagen: Canva
Una de las cosas más importantes que puedes hacer para apoyarla es construir una buena relación con ella. Llámala, mándale mensajes y conéctate con ella de manera significativa. Hazle saber lo importante que es para ti. Recuérdale su valor y autoestima.
Quieres construir un puente que ella pueda cruzar cuando se sienta sola, rechazada o abrumada. En las relaciones amorosas, necesitamos facilitar que nuestros seres queridos se conecten con nosotros.
Puede que tengas opiniones firmes sobre sus elecciones de pareja, pero esas opiniones no la harán sentir más cerca de ti. Si ella está buscando consejos y apoyo, habla sobre patrones y dale una visión de cómo son las relaciones saludables.
En las relaciones amorosas, necesitamos facilitar que nuestros seres queridos se conecten con nosotros. Imagen: Canva
Creo que el presidente Jeffrey R. Holland ofreció uno de los mejores discursos sobre relaciones en febrero de 2000, titulado “How do i love thee?”, el cual ha ayudado a muchas personas a evaluar la salud de sus relaciones.
Pasa tiempo con ella construyendo una relación y conócela para que ella pueda conocerse a sí misma. Puede que no te necesite ahora, pero si este patrón continúa, necesitará saber que hay alguien ahí que puede ayudarla a salir de estos patrones disfuncionales.
Es difícil ver a alguien tomar decisiones terribles en sus relaciones, pero te sentirás menos ansiosa, resentida y abrumada cuando permitas que sea ella quien pida ayuda cuando esté lista.
Fuente: Meridian Magazine
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