Recientemente, la revista National Geographic publicó un artículo sobre el profeta José Smith y La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
Aunque el texto presenta una narrativa interesante, contiene algunas inexactitudes e interpretaciones distorsionadas sobre la historia y la doctrina de la Iglesia.
Nuestro propósito es aclarar algunos puntos basándonos en fuentes oficiales de la Iglesia, incluyendo la sección Temas del Evangelio, manuales de la Iglesia y declaraciones de líderes de la Primera Presidencia y del Cuórum de los Doce Apóstoles.
“José Smith fundó una denominación cristiana que se convertiría en uno de los grupos religiosos más conocidos de Estados Unidos…”

José Smith no fundó una nueva denominación cristiana. Creemos que fue llamado por Dios para restaurar la misma Iglesia que Jesucristo estableció durante Su ministerio terrenal.
Esta Restauración devolvió a la humanidad la plenitud del evangelio, el sacerdocio y las ordenanzas necesarias para la salvación.
“Cuando Jesucristo se encontraba en la tierra, estableció Su Iglesia entre Sus seguidores. Después de Su crucifixión y de la muerte de Sus apóstoles, la plenitud del Evangelio fue quitada de la tierra debido a que había una apostasía generalizada.
Por medio del profeta José Smith, nuestro Padre Celestial y Su Hijo Jesucristo restauraron la plenitud del Evangelio, y la Iglesia verdadera de Jesucristo se encuentra nuevamente sobre la tierra”. — Temas y preguntas: La Restauración de la Iglesia
“…también conocida como Iglesia Mormona”

La forma correcta de referirse a la Iglesia es La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
El término “Iglesia Mormona” no representa adecuadamente nuestra fe, ya que desvía el enfoque hacia un apodo y no hacia el nombre del Salvador.
“Nadie, aparte de Smith, vio las planchas de oro…”

El artículo omite que once testigos presenciales declararon haber visto las planchas de oro. Tres de ellos las vieron por medio de un ángel, y ocho las sostuvieron físicamente.
Estos testimonios se conservan hasta hoy al inicio de cada edición del Libro de Mormón, bajo los títulos Testimonio de Tres Testigos y Testimonio de Ocho Testigos.
Adicionalmente, la Iglesia también tiene registro de testigos adicionales de las planchas de oro.
“…dirigió a sus seguidores hacia el oeste…”
El desplazamiento de los Santos hacia el oeste de los Estados Unidos no fue motivado por ambición ni por ansias de poder, sino por la intensa persecución religiosa que José Smith y sus seguidores padecieron.
En 1838, el gobernador del estado de Misuri emitió una Orden de Exterminio contra los Santos, declarando que debían ser “expulsados o exterminados”.
Hombres, mujeres y niños fueron forzados a abandonar sus hogares y atravesar el país en busca de libertad religiosa, hasta encontrar refugio en lo que hoy es Utah.
“La práctica secreta de la poligamia…”

La práctica del matrimonio plural (o poligamia) efectivamente existió entre algunos miembros de la Iglesia en el siglo XIX. Sin embargo, fue introducida por mandamiento revelado a José Smith y vivida por un número limitado de personas, siempre con fines espirituales, no por deseo personal.
Según el ensayo oficial de la Iglesia “El matrimonio plural en Kirtland y Nauvoo”, la revelación sobre el matrimonio plural se enseñó de forma gradual. Muchos lucharon por comprender y aceptar ese mandamiento, incluido el propio profeta.
Esta práctica no era pública debido a la intensa persecución que enfrentaban los santos. No era obligatoria y quienes la vivían lo hacían con fe y por revelación personal.
En 1890, mediante revelación de Dios al entonces presidente Wilford Woodruff, la Iglesia publicó el documento conocido como el Manifiesto, que puso fin oficialmente a la práctica.
Hoy, la Iglesia no aprueba ni realiza matrimonios plurales, enseñando que el matrimonio monógamo entre un hombre y una mujer es el estándar del Señor.
“Hasta el momento de su muerte, se había casado con más de 30 mujeres… muchas eran muy jóvenes”
Los registros históricos sobre el número exacto de matrimonios plurales de José Smith varían, y no todos los relatos cuentan con evidencia contemporánea verificable.
El ensayo oficial de la Iglesia reconoce que algunas de las mujeres eran jóvenes, pero explica que los estándares sociales del siglo XIX eran muy distintos a los actuales.
“El matrimonio a esa edad, que no es apropiado según las normas de hoy, era legal en esa época, y algunas mujeres se casaban a mediados de la adolescencia. Helen Mar Kimball habló de su sellamiento a José Smith como “sólo por la eternidad”, lo cual sugiere que la relación no incluía las relaciones sexuales”.
Además, muchos de esos sellamientos eran espirituales, no matrimoniales, con el propósito de vincular familias eternamente.
No existen pruebas de que José Smith haya tenido hijos con esposas plurales.
“Había una base teológica y bíblica para el matrimonio plural…”
Así como Abraham, Isaac, Jacob y otros profetas del Antiguo Testamento, a José Smith se le instruyó mediante la revelación acerca de la posibilidad del matrimonio plural bajo circunstancias específicas.
Esta práctica tenía como propósito “aumentar la gloria eterna” y “fortalecer las familias dentro del convenio”, según se enseña en Doctrina y Convenios 132.
La revelación fue entendida como parte de un principio eterno de sellamiento familiar, no como una regla universal.
Hoy la Iglesia enseña que “la monogamia es la ley permanente del Señor”, y reafirma ese principio en todos sus manuales y declaraciones oficiales.
“La oposición concluyó con una denuncia publicada en el Nauvoo Expositor…”

Efectivamente, el periódico Nauvoo Expositor publicó acusaciones contra José Smith en 1844. Por decisión del Consejo de la ciudad de Nauvoo, y no únicamente de José Smith, se determinó que el periódico violaba las leyes locales de difamación y representaba una amenaza para la seguridad pública, por lo que se ordenó la destrucción de la imprenta.
Esa acción fue usada por los opositores para acusar al profeta de tiranía y terminó provocando su arresto y su muerte en Carthage, a manos de una turba armada.
La Iglesia considera la muerte de José y de su hermano Hyrum como un martirio, el testimonio final de su fe y de su misión divina.
“Smith intentó aspirar a un cargo más alto… anunció su candidatura a la presidencia”

Sí, José Smith se postuló a la presidencia de los Estados Unidos en 1844. Sin embargo, su propósito no era político, sino promover principios de libertad religiosa, igualdad y justicia.
En su plan de gobierno “Opiniones del general Smith sobre el poder y la política del Gobierno”, José defendió:
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Un gobierno federal más fuerte para proteger las minorías y la libertad religiosa.
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La abolición de la esclavitud mediante una emancipación compensada.
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Reformas en el sistema judicial.
También apoyaba la expansión territorial del país, incluyendo la anexión de Texas, Oregón y otros territorios. Su candidatura reflejaba una visión cristiana de gobierno justo, inspirada en las enseñanzas de Cristo sobre amar y servir al prójimo.
“Cuando Smith fue asesinado… los Santos iniciaron su legendario éxodo hacia el oeste”

Tras el asesinato de José Smith, la Iglesia enfrentó una crisis de sucesión. El Cuórum de los Doce Apóstoles, presidido por Brigham Young, fue reconocido por los miembros como la autoridad legítima para dirigir la Iglesia.
En 1846, bajo la dirección del presidente Young, los santos comenzaron su migración hacia el oeste, cruzando el país hasta llegar al Valle del Lago Salado (Utah).
Esta travesía, marcada por el frío, el hambre y grandes pérdidas, se convirtió en un símbolo de fe, perseverancia y confianza en Dios. Hoy es recordada como una de las mayores demostraciones de fe colectiva en la historia de Estados Unidos.
“Emma Smith… siguió negando que su esposo hubiera practicado la poligamia”
Emma Smith enfrentó grandes desafíos al ser esposa del profeta durante un tiempo de persecución y conflicto. Aunque permaneció en Nauvoo y luego volvió a casarse, mantuvo su fe en Dios y fue una madre dedicada hasta el final de su vida.
La historia de Emma se recuerda con respeto y compasión, reconociendo su papel esencial en los primeros años de la Restauración.
El enfoque de nuestra fe

La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días reconoce que la historia de la Restauración incluye momentos complejos y desafiantes.
Sin embargo, el centro de nuestra fe no está en las controversias históricas, sino en Jesucristo, el Salvador y Redentor de la humanidad. Él es el fundamento de todas nuestras creencias, y es por medio de Él que encontramos paz, perdón y propósito.
Invitamos a todos los que deseen comprender mejor nuestra historia y doctrina a consultar las fuentes oficiales de la Iglesia disponibles en ChurchofJesusChrist.org, y a estudiar personalmente el Libro de Mormón, que testifica del amor y la misión de Jesucristo.



