Todavía puedo recordar el lugar exacto en el que estaba sentado cuando supe que el Libro de Mormón era verdadero. Me encontraba sentado en una silla de playa en un balcón de Corona del Mar, California, esperando el momento perfecto para poder ir a surfear.
Tenía poco de haber empezado a conocer e investigar seriamente La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días cuando comencé a leer el Libro de Mormón.
Cuando comencé mi estudio, me di cuenta de que lo más importante que podía hacer era averiguar si el Libro de Mormón era verdadero o no.
A las personas que se oponen a la Iglesia no les gusta que alguien diga: “Sé que el Libro de Mormón es verdadero”.
Aunque suene repetitivo, no sé de qué otra manera decirlo: sé que el Libro de Mormón es verdadero, sin embargo, no voy a dejarte así, te diré cómo es que sé que es verdad.
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¿Ver para creer?
Obtener una respuesta no fue algo que sucedió de la noche a la mañana. En mi caso, necesitaba pruebas, no era suficiente que alguien me dijera que era verdad. Para mí, la existencia del Libro de Mormón tenía que tener lógica. Tenía que tener sentido.
Cuando comencé a investigar más, me di cuenta que había muchas personas que decían que el Libro de Mormón era una mentira. Eso me dio más ganas de leerlo y estudiarlo.
Otra cosa que observé fue que la mayoría de las personas que condenaban públicamente el Libro de Mormón, nunca lo habían leído. Se dejaban llevar por la palabra de su pastor, de sus padres, amigos o de cualquier otra persona sin tomarse siquiera la oportunidad de leerlo.
Me parece muy gracioso que alguien me diga, con absoluta certeza, que el Libro de Mormón no es verdadero aun después de haber admitido que nunca lo leyeron.
¿Es el Libro de Mormón una mentira?
En pocas palabras, si el Libro de Mormón es verdadero, entonces José Smith sí fue un profeta. Si José Smith fue un profeta, entonces La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días es la misma Iglesia que Cristo estableció mientras estuvo en la tierra.
Es así de simple.
Entonces, la pregunta que envuelve a todas las preguntas está relacionada con la veracidad del Libro de Mormón.
Todo lo que surge en torno al libro toma relevancia si es que el Libro de Mormón es verdadero, por lo que no puedo entender porqué tantas personas dedican tanto de su tiempo a criticar todos los demás aspectos o doctrinas de la Iglesia.
Si vas a atacar algo, ve directamente al meollo del asunto y enfócate en el Libro de Mormón. Si cortas algo de raíz, el resto morirá, ¿verdad? Si retiras la piedra angular, la estructura se derrumbará.
Uno de mis amigos y un converso a la Iglesia dijo algo que nunca olvidaré y que de ninguna manera lo hizo con la intención de faltarle el respeto al Libro de Mormón.
Estaba hablándome de los diferentes momentos de su vida en los que su fe y el papel que desempeñaba el Libro de Mormón se vieron probados. Con una sonrisa en su rostro me dijo:
“Si arrojaras una bomba nuclear sobre mi testimonio, el Libro de Mormón sería como aquella pequeña cucaracha que se las ingenia para salir a la superficie desde debajo de todos los escombros”.
No se puede negar la existencia de ese libro. Está ahí para que todos lo lean, y puede sobrevivir a todos y cada uno de los ataques que recibe.
Si alguna vez tienes dudas sobre la restauración o sobre José Smith, simplemente lee el Libro de Mormón y haste las siguientes preguntas:
1. ¿Podría un joven sin educación llegar a escribir 642 páginas de escrituras antiguas por su propia cuenta y que además fueran históricamente precisas y de naturaleza profética?
2. ¿Es posible que ese joven comprendiera e incluyera estilos de escritura literaria hebrea antigua, como modismos y quiasmo, algunos de los cuales ni siquiera se descubrieron sino hasta muchos años después de que José Smith muriera?
3. ¿Cómo pudo José Smith saber tanto sobre el Oriente Medio, especialmente sobre la Península Arábiga, de donde provenían Lehi y su familia? El libro incluye hallazgos en esa región que nadie había descubierto en ese tiempo.
4. ¿Cómo pudo José Smith inventar aproximadamente 200 nombres nuevos en el Libro de Mormón que luego resultarían ser de naturaleza semítica?
5. Si crees que José Smith no pudo haber escrito este libro, ¿entonces de dónde provino? Si decimos que el diablo lo incitó a hacerlo… entonces, ¿por qué Satanás querría publicar otro testamento de Jesucristo, un libro que no hace más que fomentar la rectitud? Jesús dijo que una casa dividida contra sí misma caería.
6. ¿Quiénes son las “otras ovejas” de Juan 10:16 que escucharían la voz de Jesús?
7. ¿Por qué hay volúmenes de libros escritos por autores que no son Santos de los Últimos Días que afirman que Cristo vino y visitó el continente Americano hace miles de años, tal como se registra en tercer Nefi? ¿Cómo pudo haberlo sabido José Smith cuando en aquella época nadie siquiera consideró tal idea?
8. Si tenemos el palo de Judá (registro de los judíos o la Biblia), ¿en dónde está el palo de José al que se hace referencia en Ezequiel 37: 15-20? El Libro de Mormón es la única explicación para ese versículo. Lehi era descendiente de José. ¿Crees que José Smith pudo haberlo sabido por pura casualidad?
9. ¿Cómo es posible que haya tantos testigos del Libro de Mormón y las planchas y que ninguno de ellos haya negado su testimonio aun cuando algunos de ellos se molestaron con José Smith? Con tantas personas involucradas… una mentira de tal magnitud podría fácilmente haber sido descubierta.
10. ¿Cómo es que el Libro de Mormón nunca cayó en contradicciones a pesar de ser un libro extremadamente complejo? Después de todos estos años… alguien debería haber encontrado algo… pero no ha sido así.
Y la pregunta más importante que debes hacerte es:
11. ¿Cómo me siento al leer el Libro de Mormón?
No dejes que nadie te diga que no puedes confiar en tus sentimientos. Somos seres espirituales, y si no podemos confiar en nuestros sentimientos, ¿entonces para qué los tenemos?
Una y otra vez en el Antiguo y Nuevo Testamento se nos dice que podemos confiar en esa “voz apacible y delicada” para guiarnos en nuestra toma de decisiones. (1 Reyes 19:12)
Podría compartir evidencia tras evidencia que respalde la veracidad del Libro de Mormón, pero cada una de estas evidencias quedaron de lado en comparación al susurro del Espíritu que sentí aquel día en la playa.
Si nunca has leído el libro, ¡léelo!
Si es lo que pretende ser… entonces podría ser el libro más importante que hayas leído. Personalmente, pienso que tiene menos sentido creer que José Smith haya logrado todo esto sin ayuda Divina que creer que Dios preservó un registro que sería publicado en los últimos días.
De hecho, sería completamente imposible debido a las muchas cosas que acertó y que no se habían descubierto en ese entonces. Eso no es algo que se logra sin ayuda de los cielos.
No hay duda de que esas planchas existieron. Muchas personas pudieron tocarlas con sus propias manos y verlas con sus propios ojos.
Incluso las personas que intentaron robárselas a José sabían que él tenía algo especial. Las planchas existían, y ahora tú puedes sostenerlas con tus propias manos y descubrir por ti mismo si son verdaderas.
Quiero que mi testimonio sea el del élder Holland.
“Quiero que quede absolutamente claro cuando esté ante el tribunal del juicio de Dios que he declarado al mundo… que el Libro de Mormón es verdadero”. –“Seguridad para el alma”
Fuente: Greg Trimble
