Fui una madre ama de casa durante siete años. Luego, me convertí en una madre que trabajaba tiempo completo con un esposo desempleado y dos hijos en casa. Ahora, continúo trabajando tiempo completo como madre soltera. Al haber experimentado la maternidad de ambos lados, entiendo los desafíos que presenta cada serie de circunstancias. Ninguna de las situaciones es fácil y los comentarios insensibles pueden hacer las cosas incluso más difíciles. Entonces, aquí está, mi lista personal de cosas que NO les debes decir a las madres amas de casa.
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- Debe ser genial no tener que trabajar
Las madres amas de casa no presionamos una tarjeta de control de entrada y salida del trabajo, sino que estamos en el reloj las 24 horas, los 7 días de la semana. Insinuar que criar hijos y administrar un hogar no es un trabajo puede hacernos sentir menospreciadas.
Créeme, cuando digo que no estamos holgazaneando en el sillón por horas y horas, terminando de ver novelas y comiendo bombones, estamos trabajando arduamente para atender las necesidades físicas, espirituales y emocionales de nuestras familias en un ambiente seguro y amoroso.
Además, nunca supongas que nos quedamos en casa porque nuestros esposos ganan montones de dinero. Muchas familias hacen grandes sacrificios para que mamá pueda estar en casa con los niños.
- ¿Qué haces con todo ese tiempo libre?
Las personas que hacen esta pregunta nunca han criado hijos o han olvidado realmente cómo es. Los bebés y los niños pequeños necesitan de atención casi constante. Cuando mis hijos eran pequeños, pasaba la mayor parte del día jugando con ellos, enseñándoles, alimentándolos, bañándolos y asegurándome de que no se lastimaran a sí mismos o se asfixiaran con algo.
Incluso, cuando nuestros hijos son más grandes, todavía hay montañas de ropa que doblar, comida que preparar, compras que hacer, citas con el doctor que seguir y cuentas por pagar. Y, a menudo, dedicamos una gran parte del tiempo a las escuelas de nuestros hijos y otros lugares. Si tenemos suerte, encontraremos una hora o dos para estudiar para el curso de la universidad que tomamos, prepararnos para nuestra lección de la escuela dominical o ir al gimnasio para ejercitarnos rápido, ya que una vez que los niños están en casa, nuestro tiempo no nos pertenece. Hay medallas al mérito en las que trabajar, clases de baile a las que asistir y proyectos de ciencia que completar.
- Ya que tienes tiempo de sobra, ¿podrías hacer algunas docenas de pastelitos para la fiesta de la clase de mañana?
Sí, entiendo que probablemente tenga más tiempo libre que una madre que trabaja tiempo completo, pero “improvisar” sorpresas para fiestas o una cena para un vecino enfermo no siempre es tan fácil como suena. Probablemente, necesite hacer un viaje al supermercado que no planifiqué, además de reorganizar mi horario para tener tiempo para cocinar. Me siento feliz de ayudar y servir cuando puedo. Sin embargo, recuerda que solo porque sea una madre ama de casa no significa que no tenga todo mi día planificado detalladamente. Tampoco significa que soy Betty Crocker.
- Si estás cansada, ¿Por qué no tomas una siesta cuando el bebé lo hace?
Esta es una gran idea en teoría. Sin embargo, cuando los bebés (o, los niños, si es el caso) están durmiendo, a menudo, es mí única oportunidad de marcar algunas cosas de mi lista de quehaceres. Ahí es cuando cargo el lavaplatos, doblo la ropa, friego los inodoros, trapeo los pisos y recojo los juguetes. Si hay tiempo suficiente, incluso, podría enviar un correo o devolver una o dos llamadas.
- Nunca podría hacer lo mismo que tú. Moriría sin una conversación de adultos
De manera intencional o no, esta afirmación implica que una madre ama de casa no es tan inteligente como aquellas que no se quedan en casa con los niños todo el día. Para ser sincera, como madre que se quedaba en casa, anhelaba tener una conversación de adultos y estimulación intelectual. Si bien criar a los hijos es increíblemente gratificante, no supongas que eso significa que tampoco anhelamos mejorar nuestras mentes y espíritus.
- Estoy segura de que no eres la única que ha malgastado dinero en un título universitario
Ya he conocido a una madre ama de casa y se lamenta de haber recibido educación universitaria. Implicar que lo estás desperdiciando es implicar que el único propósito de una educación es ganar dinero. Una madre que recibió educación puede enriquecer las vidas de sus hijos y ser un gran ejemplo para ellos. Y, sí, tener un título universitario es un salvavidas por si las circunstancias imprevistas requieren que ingreses inesperadamente a la fuerza laboral – que es lo que exactamente me pasó a mí.
- Pensé que tu casa estaría impecable
Incluso, si me encuentro en casa todo el día, no significa que tenga tiempo constantemente para limpiar mi casa. Quizá, uno de mis hijos está enfermo. Tal vez, estoy enferma. O, puede ser que decidiera que mis hijos necesitaban de mi atención más que el lavadero de la cocina lleno de platos sucios.
Si soy una madre ama de casa o una madre trabajadora, soy una madre, y los momentos con mis hijos – cuando sea que los tenga – son lo que me ayudan a sobrellevar los tiempos difíciles y logran que todo lo que hago valga la pena.
Artículo originalmente escrito por Jessica Carter y publicado por ldsliving.com con el título “7 Things You Shouldn’t Say to Stay-at-Home Moms.”