Para los Santos de los Últimos Días, la Santa Cena es una ordenanza en la que los miembros de la Iglesia participan del pan y del agua en memoria del sacrificio expiatorio de Jesucristo una vez a la semana.
Esta ordenanza es una parte esencial de la adoración y del progreso espiritual y, por medio de ella, los miembros de la Iglesia renuevan los convenios que hicieron con Dios al bautizarse.
Asimismo, esto también refleja una antigua práctica cristiana destinada a “[anunciar] la muerte del Señor hasta que Él venga” (1 Corintios 11:26).
De acuerdo al Manual de la Iglesia, se recomienda a los Santos de los Últimos Días “tomar la Santa Cena con la mano derecha, cuando sea posible”.
Aunque este tipo de actos pueden pasar desapercibidos, en la antigüedad, la mano derecha se usaba para realizar convenios dedicados a algunas deidades de diferentes culturas (Brent J. Schmidt, “Relational Faith”, pág 91).
Por su parte, la Biblia menciona la mano derecha en 166 ocasiones para representar fidelidad, fuerza y poder, lo que se asemeja al significado de los convenios y saludos que otorgan bendiciones en otras culturas (Brent J. Schmidt, “Relational Faith”, pág 196).
El simbolismo de la mano derecha en el mundo antiguo significa alianzas, mientras que la izquierda tiene connotaciones negativas que todavía perduran en algunas lenguas, como el inglés y el francés.
Por otro lado, en la cultura maya la mano izquierda también estaba relacionada con aspectos negativos dentro de sus rituales.
En resumen, utilizar la mano derecha tiene un largo historial en muchas culturas del mundo.
La razón de esto
La Santa Cena es considerada una ordenanza sagrada instituida por el Señor Jesucristo. Nos recuerda el sacrificio expiatorio del Señor y los convenios que hemos hecho voluntariamente para seguirle.
Hacemos el convenio de “[estar] dispuestos a tomar sobre [nosotros] el nombre de [Su] Hijo, y a recordarle siempre, y a guardar sus mandamientos que Él [nos] ha dado” y se nos promete que al cumplir este convenio, tendremos el Espíritu Santo con nosotros.
Cuando tomamos pan y agua con nuestra mano derecha, simbólicamente aceptamos la invitación personal del Señor y demostramos fe, lealtad y obediencia a nuestro Padre Celestial por medio de la bondad de Su hijo Jesucristo.
Recordemos lo que nuestro presidente Russell M. Nelson nos ha indicado:
“La mano que se usa al tomar la Santa Cena sería entonces, por lógica, la misma que se usa al hacer cualquier otro juramento sagrado. Para la mayoría de nosotros, esto quiere decir la mano derecha.
[Jesucristo] instituyó la Santa Cena, Él ofreció Su cuerpo y sangre a favor de toda la humanidad, incluso por mí, y designó el pan y el agua como emblemas simbólicos.
Porque tengo una mano derecha, la ofrezco al tomar la Santa Cena como juramento de que siempre recordaré Su sacrificio expiatorio, que tomaré Su nombre sobre mí y lo recordaré, y guardaré los mandamientos de Dios”.
Se nos anima a participar de la Santa Cena con la mano derecha. Si aquello no es posible debido a una discapacidad física, falta de conocimiento sobre el simbolismo o alguna otra razón, esto no invalida la ordenanza.
No debemos preocuparnos si en el pasado hemos usado o no la mano derecha durante esta ordenanza, o que se convierta en una carga en el futuro. Lo que realmente debería de importarnos es comprender el significado del sacrificio expiatorio que Jesucristo hizo por nosotros.
Fuente: Meridian Magazine