Sabemos que todos los pecados pueden ser perdonados excepto el de negar el Espíritu Santo. En el caso de asesinato, sé que la persona puede ser perdonada pero no podrá obtener la vida eterna, solo el reino telestial.
¿Sucede lo mismo en el caso del aborto? ¿Puedes ser perdonado, pero nunca poder recibir la exaltación?
Respuesta
Una persona no solo puede ser perdonado, sino que al Señor le encantaría que pudiera arrepentirse para recibir Su perdón. En 1972, la Primera Presidencia expresó:
“Hasta donde se sabe, [el Señor] no ha incluido el aborto junto al crimen del pecado imperdonable y el derramamiento de sangre humana inocente.
El hecho de que no lo haya hecho sugeriría que no pertenece a esa clase de delito y, por lo tanto, estará sujeto a las leyes del arrepentimiento y el perdón”.
Como una instrucción más actual, la Iglesia publicó en su sitio web:
“Los miembros de la Iglesia que fomenten un aborto en cualquier forma, pueden quedar sujetos a la disciplina de la Iglesia.
Los líderes de la Iglesia han dicho que ciertas circunstancias excepcionales podrían justificar un aborto, por ejemplo, cuando el embarazo sea el resultado de incesto, de violación, cuando esté en peligro la vida o la salud de la madre según la opinión de autoridades médicas competentes, o cuando dichas autoridades determinen que el feto tiene defectos graves que no le permitirán sobrevivir más allá del nacimiento; pero aun esas circunstancias no justifican automáticamente que se provoque un aborto.
Los que se enfrenten con tales circunstancias deben considerar el aborto sólo después de consultar con sus líderes locales de la Iglesia y de recibir una confirmación por medio de la oración sincera”.
La persona puede y debe arrepentirse, porque la expiación de Cristo es lo único que puede aliviar cualquier pesar.
Solo podemos ser juzgados adecuadamente de acuerdo con la luz y el conocimiento del evangelio que tuvimos en nuestra vida cuando tomamos tal decisión.
Sé que puede sonar un poco extraño, así que permíteme explicarlo de esta manera. El asesinato de otra persona va en contra de las leyes del país. Instintivamente sabemos que esto está mal.
El aborto, de cierta manera, está atado a una “moralidad condicional”, lo que significa que todo depende de la persona que desea un aborto. Si dicha persona lo ve como un “método anticonceptivo”, esa será su posición.
Sin embargo, aquellos de nosotros que hemos sido instruidos con ciertos valores cristianos, sabemos que quitarle la vida a alguien va en contra del plan de Dios. Aquello se convierte en un problema mayor, tiene conocimiento de sus acciones.
Doctrina y Convenios 82: 3
“Porque de aquel a quien mucho se da, mucho se requiere; y el que peque contra mayor luz, mayor condenación recibirá”.
Podría serle útil estudiar la conversión de los Anti-Nefi-Lehitas que se encuentra en el Libro de Mormón. Había cometido todo tipo de pecado, incluido el asesinato. Luego se convirtieron y cambiaron completamente de corazón.
Sus cargas fueron eliminadas y sintieron el misericordioso amor de Dios. Cambiaron totalmente sus vidas y rechazaron sus hábitos anteriores. El Libro de Mormón deja en claro que Dios no les negó ninguna bendición una vez que se volvieron hacia él.
Para las jóvenes solteras o adolescentes embarazadas, les ofrezco este consejo: “Acudan a su obispo. Trabajen con él y planifiquen a acción a seguir, la cual puede ser dar a su hijo en adopción”. Como mínimo, pueden ver qué recursos están disponibles en su ciudad, estado o país.
Si te has realizado un aborto o, en el caso de los hombres, has financiado o fomentado un aborto, debes hablar con tu obispo. Es mejor confesar en esta vida que albergar el pecado hasta la vida venidera.
Fuente: askgramps