Pregunta
Me han dicho que necesito ser más humilde en mis relaciones y estoy tratando de seguir este consejo. Sin embargo, es difícil porque siento que la gente intentará pasar sobre mí.
Incluso en mi matrimonio, cuando mi esposa dice que hice algo que la lastimó, quiere que la escuche y esté de acuerdo con su versión de los hechos.
Odio no poder compartir mi opinión sobre distintos asuntos sin que me digan que debo ser humilde. ¿No hay siempre dos lados en cada historia?
Si la humildad es lo mismo que aceptar todas las culpas y no poder compartir mi perspectiva. Entonces, no sé si podré cumplir con esto.
¿Cuál es tu definición de ser humilde?
Respuesta
Imagen: Shutterstock
También te puede interesar: Terapeuta Santo de los Últimos Días: 4 maneras de evitar las relaciones tóxicas
Tienes razón en que una relación unilateral no es una relación en absoluto.
Si sientes que necesitas cerrar la boca y estar de acuerdo en todo, es hora de tomar cartas en el asunto. Debes saber si esta es una reacción personal por no saber cómo comunicarte con tu cónyuge. O, si hay dinámicas en la relación que necesitan cambiar.
Es necesario que analicemos ambas posibilidades.
Antes de que empieces a culpar a los demás, es importante analizar cómo te comportas en las relaciones.
Tu esposa podría estar diciéndote que algo que estás haciendo se interpone en su camino hacia una relación plena. Si descartas de inmediato lo que dice y piensas que es su forma de ganar poder, perderás su invitación a la cercanía.
Fuente: Shutterstock
Por supuesto, no sé nada sobre su matrimonio. Sin embargo, en mi experiencia, la mayoría de los comentarios y críticas en el matrimonio son intentos de crear cercanía.
Es probable que tu esposa esté intentando decirte qué le impide sentirse vista y escuchada. Cuando no nos sentimos vistos o escuchados en nuestros matrimonios, retrocedemos.
El hecho de que te pida algo es una buena señal de que eres importante para ella. Si no le importaras, no estaría tratando de cerrar la brecha entre ustedes dos.
Si ves tu matrimonio como nada más que un juego de poder entre dos personas, será imposible que tú y tu esposa se sientan cerca el uno del otro.
Fuente: Shutterstock
Es posible que estés buscando la debilidad en los demás sin mostrar nunca tu propia debilidad. Dado que estás recibiendo estos comentarios de otros, es una buena oportunidad para examinar tus reglas y creencias sobre las relaciones.
¿Te permites equivocarte? ¿Corriges a los demás? ¿Escuchas sin interrumpir? ¿Sigues siendo curioso y muestras interés en las perspectivas de otras personas? ¿Qué amenazas observas si tu esposa ve las cosas de manera diferente?
Si tuviste experiencias en las que otros buscaban lastimarte o dominarte, ¿estás abierto a aprender de una mejor manera?
Fuente: Shutterstock
Ser humilde no significa que no puedas tener una opinión. Ser humilde significa que estás abierto a aprender.
No crees que tienes la respuesta definitiva. No te sientes amenazado por un punto de vista diferente. Reconoces que otros incluso experimentarán e interpretarán los mismos eventos de formas completamente únicas.
La humildad es hacer espacio para las ideas y perspectivas de otras personas.
Poseer convicciones personales no es el problema. El problema es creer que es tu trabajo desafiar las experiencias y creencias de otras personas cuando chocan con tus creencias más profundas.
Imagen: Canva
Si crees que la vida se trata de ganar y perder. Entonces, cada conversación con los demás se sentirá como si estuvieras yendo a la guerra.
Si este es el caso, te invito a probar algo nuevo.
La próxima vez que estés conversando con alguien, déjate sorprender por lo que está diciendo. Incluso podrías decirte a ti mismo o a ellos: “¡Guau, no sabía eso!”
Puedes continuar permitiendo que alguien comparta su experiencia sin sentirse desafiado.
Si sientes que necesitas compartir tu perspectiva, puedes compartirla teniendo en cuenta que esta es solo tu experiencia.
Por ejemplo, puedes decir algo como “Tengo una opinión diferente sobre eso, ¿puedo compartirla?”
Imagen: Canva
Una vez más, el tiempo lo es todo. Si solo compartes tus pensamientos para contradecir lo que dice tu esposa. Entonces, esto no es realmente compartir tus pensamientos. Es una actitud defensiva.
Si no estás dispuesto a ser vulnerable y correr el riesgo de plantear tus pensamientos y preocupaciones primero. Entonces, honra tus esfuerzos escuchando y haciendo espacio para las preocupaciones de tu esposa.
Piensa en tus preocupaciones y esfuérzate por entender su punto de vista. Luego, si tienes algo más que decir al respecto, dale un poco de tiempo y vuelve a hablar del tema con ella.
Asimismo, es importante observar la dinámica de su relación.
Imagen: Shutterstock
¿Tu esposa tiene dificultades con esta misma dinámica? ¿Le cuesta hacer espacio para tu perspectiva cuando la compartes? Si es así, pregúntale si ambos pueden esforzarse para mejorar su comunicación.
Observen si ambos están haciendo espacio para la perspectiva del otro. Hazle saber lo importante que es para ti comprenderla y ser comprendido por ella.
Fuente: Meridian Magazine
