Estar rodeado de miembros de la Iglesia es maravilloso, ¿verdad?
Sentimos el Espíritu, somos fortalecidos, nuestra fe crece y tenemos un gran deseo de hacer lo correcto.
Sin embargo, esta situación no siempre sucederá.
En algunas ocasiones, nos rodearemos de personas de diferentes religiones, con creencias opuestas e incluso compartiremos con personas que ni siquiera creen en Dios… ¿Qué hacer en este caso?
¿Alguna vez has estado o estás en un ambiente laboral donde nadie cree en Dios? ¿Cómo fue o cómo es esta situación para ti?
A continuación, mencionaremos 3 cosas que podrían ayudarte en una situación similar:
1. El mandamiento de amar a nuestro prójimo sigue vigente

No solo debemos amar a aquellos que creen lo mismo que nosotros, debemos amar a todos.
El mandamiento de amar a nuestro prójimo sigue vigente.
“Amarás a tu prójimo como a ti mismo”. – Mateo 22: 39
No solo debemos amar a aquellos que creen lo mismo que nosotros. Cristo es nuestro ejemplo perfecto de que debemos amar a todos, sin distinción.
2. Respetar los puntos de vista diferentes

Si queremos ser respetados, debemos tener el mismo respeto por los demás. Imagen: Canva
Otra cosa muy importante que siempre debemos recordar es respetar las creencias y opiniones de los demás.
El Artículo de Fe N° 11 es muy claro al respecto:
“Reclamamos el derecho de adorar a Dios Todopoderoso conforme a los dictados de nuestra propia conciencia, y concedemos a todos los hombres el mismo privilegio: que adoren cómo, dónde o lo que deseen”.
Si queremos ser respetados, debemos tener el mismo respeto por los demás. ¡Si queremos que respeten nuestra fe, también debemos respetar si aquellos que nos rodean no pertenecen a ninguna religión!
3. Sé un misionero(a)

Podemos testificar de Cristo y de nuestro Padre Celestial en todo momento con nuestro ejemplo. Imagen: Canva
Estar en un lugar donde nadie cree en Dios es un gran campo para la obra misional, ¿has pensado en eso?
Podemos testificar de Cristo y de nuestro Padre Celestial en todo momento sin siquiera decir una sola palabra.
Nuestro ejemplo por sí solo mostrará en qué y en quién creemos.
El secreto

El secreto es permanecer firmes en nuestra fe. Imagen: Canva
El secreto es permanecer firmes en nuestra fe, respetar a los demás en sus creencias y opiniones, y por supuesto, siempre ser pacientes en el trato con todos.
Espero que estos consejos te hayan ayudado y recuerda que no estás solo en esto, Dios está contigo y te da la fortaleza que necesitas para enfrentarte a situaciones difíciles como esta. ¡Muchas buenas vibras!
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Este es un artículo que fue escrito originalmente por Inaê Leandro y fue publicado en Mais Fe con el título “O que fazer em um ambiente de trabalho onde ninguém acredita em Deus”.