En más de una ocasión, algunos han confundido a los Santos de los Últimos Días con los adventistas del séptimo día, sin embargo, existen algunas diferencias.
Para poder ayudar a las personas a entender nuestro mensaje especial y conocer a los miembros de la Iglesia de Jesucristo, compartiremos las semejanzas y diferencias claves entre estas dos religiones.
Sobre los adventistas del séptimo día
Iglesia adventista. Imagen: Pinterest
Origen y fundación
La Iglesia Adventista del Séptimo Día se organizó en Estados Unidos en 1863.
La iglesia surgió como resultado de un movimiento según el cual las personas necesitaban tener una mejor comprensión de las “verdades universales” registradas en la Biblia.
Tanto los pastores como los laicos tenían la misión de difundir el cristianismo.
La primera iglesia adventista fuera de los EE.UU., se fundó en Crespo, Argentina. En la actualidad, los adventistas están presentes en 212 países.
Membresía
Miembros de la iglesia adventista. Imagen: adventistas.org
Según datos de junio de 2022, los adventistas del séptimo día forman una comunidad de más de 21 millones de miembros.
Organización
La organización de la iglesia adventista es una jerarquía. Su sede de EE.UU. coordina el trabajo de 13 divisiones mundiales, estas a su vez coordinan otros grupos que se llaman uniones, asociaciones o misiones.
La agencia humanitaria – ADRA, coordina sus esfuerzos, pero quienes realmente realizan la obra son las comunidades locales.
Predicación del Evangelio
Varían sus proyectos en cada lugar para satisfacer las necesidades de un mundo diverso. Para eso, trabajan con un plan de predicación del Evangelio en Sudamérica, que se fundamenta en tres valores: comunión, relación y misión.
Sobre los Santos de los Últimos Días
Capilla de la Iglesia de Jesucristo. Imagen: mapio.net
Origen y fundación
La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días se restauró en Nueva York, Estados Unidos, el 6 de abril de 1830.
La Iglesia se estableció después de la primera visión del profeta José Smith, la restauración de los sacerdocios Aarónico y de Melquisedec, y la traducción del Libro de Mormón.
Existe una década de diferencia entre las primeras impresiones espirituales de José y la organización oficial de la Iglesia.
Los Santos de los Últimos Días forman parte de una corriente restauracionista. Creen que José Smith restauró la misma Iglesia que el Salvador, Jesucristo, estableció.
Esta característica la diferencia del cristianismo actual.
Los pioneros de la Iglesia de Jesucristo fueron perseguidos y emigraron al oeste de los Estados Unidos. Finalmente, la sede mundial de la Iglesia se estableció en Salt Lake City.
Membresía
Santos de los Últimos Días. Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
Actualmente, cuenta con aproximadamente 17 millones de miembros en más de 160 países.
Organización
Hoy en día, la Iglesia es dirigida por un profeta, vidente y revelador (Russell M. Nelson) y un cuórum de 12 hombres que se llama los Doce Apóstoles.
El cuórum de los Setenta apoya a los Doce en su labor.
El profeta y sus dos consejeros dirigen los asuntos generales de la Iglesia. Además, los miembros se organizan en grupos llamados estacas, barrios y ramas.
Estos grupos están definidos por límites geográficos y los líderes locales actúan dentro de estas comunidades.
Predicación del Evangelio
Todos los miembros de la Iglesia de Jesucristo tienen la responsabilidad de compartir el mensaje del evangelio con quienes lo necesiten.
Además, la Iglesia cuenta con un programa que se llama “misión” en el que jóvenes adultos entre 18 y 29 años, hombres y mujeres, dedican su vida exclusivamente a la prédica del evangelio durante un periodo de 18 o 24 meses.
Quienes sirven en una misión dejan sus hogares y comodidades para proselitar y servir a su prójimo en el lugar que la Iglesia les asigne, esto puede ser en su país o en el extranjero.
Semejanzas
Ellen G. White, cofundadora de la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Pinterest
Fundación
Ambas iglesias son cristianas y se fundaron en los Estados Unidos en el periodo de 1800.
Origen
Ambas se basan en visiones de sus profetas.
Los adventistas atesoran las palabras de la profetisa Ellen G. White mientras que los Santos siguen las enseñanzas del profeta José Smith.
Proselitismo
José Smith, profeta de la Iglesia de Jesucristo. Imagen: JosephSmith.net
Hay una necesidad de predicar el evangelio de Jesucristo. Por eso, ambas iglesias son pueblos proselitistas y salen en misiones.
Familia
Creen que la familia es el punto central de la sociedad y debido a eso, dedican buena parte de sus actividades y enseñanzas a los grupos familiares.
Enseñanza
Tienen programas diferentes para jóvenes y niños.
Valoran la enseñanza y realizan debates sobre las escrituras durante sus reuniones semanales.
Difunden sus conocimientos a través de sistemas de lectura y comunicación.
Salud física y espiritual
Ambas iglesias se preocupan por el bienestar físico y espiritual de sus miembros. Imagen: Canva
Ambas fomentan un concepto de salud integral, se preocupan por la salud física y espiritual de las personas.
Están a favor de la donación de sangre.
Ofrecen grupos de apoyo para dejar el alcohol y el tabaco.
Creencias
La visión general de estas religiones es que Jesucristo regresará y que la Tierra necesita estar preparada para este momento.
Creen que son, como institución, responsables de este proceso de preparación.
Además, creen que pueden formar una sociedad mejor al fomentar iniciativas sociales buenas.
Diferencias
Canon
Biblia. Imagen: Canva
Los adventistas y los Santos de los Últimos Días difieren en su canon.
Para los adventistas, los 40 libros que Elena G. White escribió son importantes y pueden ayudar a los cristianos a acercarse a Cristo. Sin embargo, no se comparan con la Biblia, ya que la consideran como el único libro sagrado sobre la Tierra.
Para los Santos de los Últimos Días, Dios escribió el Libro de Mormón y es un volumen de escritura que se compara a la Biblia.
Los miembros de la Iglesia de Jesucristo siguen las enseñanzas de la Biblia siempre que su traducción sea correcta.
Día de reposo
Reunión dominical en la Iglesia de Jesucristo. Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
Si bien ambas iglesias están de acuerdo en que el Señor instituyó un día de reposo, no coinciden en qué día se guarda y qué se puede hacer o no durante ese día.
Para los adventistas, el día de reposo comienza al anochecer del viernes y termina al anochecer del sábado.
El día de reposo debe comenzar y terminar con servicios breves y atractivos al anochecer con la asistencia de los miembros de la familia.
En estas ocasiones, es apropiado cantar algunos himnos, leer un pasaje de la Biblia, debatir al respecto y expresar gratitud a Dios en oración.
Para los Santos de los Últimos Días, el día sagrado es el domingo que comienza y termina a la hora convencional del reloj.
Los domingos, los Santos se reúnen en sus capillas y participan en las reuniones.
Doctrina
Santa Cena en la Iglesia de Jesucristo. Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
Los adventistas realizan la Santa Cena cuatro veces al año mientras que los Santos de los Últimos Días participan de ella semanalmente.
Otra diferencia es que para los adventistas solo los personajes de la Biblia eran profetas y para los Santos, Dios todavía llama profetas en la actualidad.
Básicamente, los dos grupos responden a las preguntas de dónde venimos y qué sucede después de la muerte de diferentes maneras. Por lo tanto, su conjunto de doctrinas es diferente.
Sin embargo, lo más importante de todo es que tanto los Santos de los Últimos Días como los adventistas creen en Dios y se esfuerzan por predicar Su evangelio.
Fuente: Mais Fe
