Hace unos días, el presidente M. Russell Ballard, del Cuórum de los Doce Apóstoles, compartió un mensaje para todo aquel que no se siente bienvenido en la Iglesia y también para los debemos dar esa bienvenida.
Muy emotivo, el presidente Ballard declaró:
“Me rompe el corazón pensar que alguien no sienta que hay un lugar para él en la iglesia el domingo. Hay un lugar para todos los hijos del Padre Celestial. Cada uno de nosotros es un precioso miembro de la familia de Dios. Ven. Dondequiera que estés, y quienquiera que seas.
Cuando entras en un edificio de la iglesia, puedes sentir Su Espíritu y Su fuerza, y puedes saber en el fondo de tu corazón que Él te ama, y que eres importante para Él. Deja que los que presiden tu barrio se acerquen a ti y quizás te den respuestas a las preguntas que puedas tener.
Espero que los miembros del barrio trabajen con un espíritu de unidad para incluirse unos a otros. En lugar de juzgarnos unos a otros, debemos recordar que al Salvador Jesucristo sólo le interesa nuestro crecimiento personal. No debemos compararnos con los demás. Amémonos los unos a los otros, y recordemos que incluso Él ‘continuó de gracia en gracia hasta recibir la plenitud’”.
