La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días continúa atendiendo las necesidades durante la actual pandemia de COVID-19 y se está asociando con otras organizaciones de todo el mundo para proyectos de ayuda humanitaria, anunció la Primera Presidencia en una carta, hoy, martes 14 de abril.
“Sabemos que Dios escuchará y contestará nuestras oraciones. Nos han enseñado a estar ‘anhelosamente consagrados’ para aliviar el sufrimiento y cuidar a los necesitados (ver Doctrina y Convenios 58:27)”, explica la Primera Presidencia en la carta.
Más de 110 proyectos de ayuda en 57 países
“Hasta la fecha, hemos aprobado más de 110 proyectos de ayuda por COVID-19 en 57 países. La mayoría de estos se realizan con socios confiables de agencias humanitarias, ministerios de salud y hospitales, lo que nos permite utilizar nuestros recursos, incluidos alimentos, productos de higiene, equipos de protección personal, equipos médicos, dinero en efectivo y otros productos, en lugares donde pueden hacer el trabajo muy bien”, agregaron.
Dejar de confeccionar ropa religiosa para hacer mascarillas y batas por ahora
Por ejemplo, las instalaciones de Beehive Clothing de la Iglesia en Brasil, México, Paraguay, Filipinas y Utah cambiarán temporalmente sus operaciones de la fabricación de ropa religiosa a la confección de mascarillas (todos los lugares) y batas (solo en Utah) para aquellos en el campo de la medicina.
La excelente labor de la Sociedad de Socorro y Caridades de la Iglesia de Jesucristo
“Estamos tratando de trabajar con los gobiernos [y] los líderes de la comunidad y consultar qué necesitan y luego responder”, dijo la hermana Sharon Eubank, presidenta de las Caridades de los Santos de los Últimos Días y miembro de la presidencia general de la Sociedad de Socorro.
“Hemos movilizado a la Sociedad de Socorro y sus familias para ayudar con algunos de estos proyectos”.
“Las Caridades de los Santos de los Últimos Días tienen mucha suerte porque tenemos asociaciones, ya sea en una pandemia o no”, agregó la hermana Eubank. “Hemos tenido relaciones de confianza con el tiempo. Entonces, cuando hay una pandemia, no tenemos que comenzar desde cero. Sabemos exactamente cómo ayudarnos unos a otros”.
En Utah, las mujeres de la Sociedad de Socorro están organizando a los miembros para participar en una asociación entre Latter-Day Saint Charities, Intermountain Healthcare y University of Utah Health para ayudar a coser 5 millones de mascarillas clínicas para donar a los trabajadores de la salud.
“Invitamos a nuestros miembros a participar en estos y otros proyectos de ayuda en sus áreas y comunidades a medida que surjan oportunidades y según lo permitan las directivas del gobierno local y las circunstancias personales”, dice la carta de la Primera Presidencia.
Fuente: newsroom.churchofjesuschrist.org