Santos de los Últimos Días brindan más de 83 mil horas de servicio por el huracán Ian

huracán Ian

Miles de miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días han prestado servicio a los afectados por el huracán Ian.

El huracán ha azotado el sureste de los Estados Unidos, siendo el estado de Florida uno de los más afectados.

Imagen: La Iglesia de Jesucristo

Este fenomeno ha superado las 100 muertes y ha causado estragos en las comunidades y ciudades de la costa de Florida, de acuerdo con las autoridades competentes.

Se han designado centros de comando temporales en los centros de reuniones Santos de los Últimos Días en las ciudades de Naples, Port Charlotte, Cape Coral y DeLand, para brindar socorro en casos de desastre a los residentes afectados durante las siguientes semanas.

Imagen: La Iglesia de Jesucristo

En total, 4,450 voluntarios han participado en los esfuerzos de asistencia logrando un total de 83,930 horas de servicio. Asimismo, la Iglesia de Jesucristo ha donado más de 68 mil kilos en suministros para los esfuerzos de reparación en el lugar.

Los voluntarios Santos de los Últimos Días han completado 2,092 órdenes de servicio, que fueron enviadas por los residentes afectados, brindando desde lonas para los techos a hasta remoción de árboles caídos y limpieza.

Imagen: La Iglesia de Jesucristo

Además, los miembros de la Iglesia se mantienen atentos a las llamadas de la línea directa de limpieza y asistencia en casos de desastres. En la última semana, 750 Santos de los Últimos Días respondieron más de 13,000 llamadas.

En situaciones como estas, los voluntarios trabajan durante el fin de semana por lo que muchos se quedan a dormir en carpas cerca del centro de comando. El domingo 9 de octubre se llevó a cabo una breve reunión sacramental antes de que todos regresaran a prestar servicio.

Imagen: La Iglesia de Jesucristo

Penny Taylor, comisionada del Distrito 4 del Condado de Collier, expresó lo siguiente durante una visita al centro de comando en Naples el sábado 8 de octubre:

“Es emocionante y muy emotivo que [los Santos de los Últimos Días] estén aquí para ayudarnos. Ese tipo de conexión entre todos es la que se necesita en este momento”.

Fuente: newsroom.churchofjesuschrist.org

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